Desde que me interesó hacer bonsai siempre me resultó más gratificante partir de una semilla que comprar un pre-bonsai o un bonsai. Con los PALOS BORRACHOS siempre tuve suerte porque son de fácil sembrado y de germinación, es más, semillas que daba por perdidas en una maceta cualquiera en un momento me asombraban creciendo como de la nada. Sin embargo, por no tomar en cuenta cuestiones básicas inherentes al cuidado de bonsai muchos de ellos se me han muerto, aunque también ha habido accidentes o travesuras de mi perro arrancando de su maceta en una oportunidad un ombú y en otra un palo borracho.
En este caso partí de semilla pero no recuerdo la cantidad de años que lo tengo, si que varias veces lo he sometido a podas drásticas, aquí también cometí el error que ya detallé en otros bonsai por lo cual quedan las ramas muy largas y desnudas con un copete de una o dos hojas al final.
Estoy tratando de revertir esta situación y empezar con las técnicas correspondientes por lo que lo primero que voy a hacer es abonar en otoño ya que supongo que el sustrato de la mayoria de las macetas están un tanto agotadas. foto tomada el 16/03/08
miércoles, 19 de marzo de 2008
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